sábado, 22 de junio de 2013

DESDE MI VENTANA:
Mi ventana me protege al tiempo que me da luz,  en el sillón me acurruco inundado  por los rayos del sol que traspasa los cristales, me quiero concentrar en la lectura del libro que el aburrimiento me ha hecho coger sin reparar en título, autor, temática, solo quiero pasar la fía mañana al calor y la luz del sol, abro al azar el libro y leo….. Artículo 14: Todos las personas son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social…   . Articulo 24,1. Todas las personas tienen derecho a obtener la tutela efectiva de los jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, sin que, en ningún caso, pueda producirse indefensión…... Artículo 27, 1. Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza……. Artículo 35, 1. Todos  tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo….. Artículo 40,1. Los poderes públicos promoverán las condiciones favorables para el progreso social y económico y para una distribución de la renta Regional y personal más equitativa, en el marco de una política de estabilidad económica. De manera especial realizarán una política orientada al pleno empleo……. Artículo 43,1. Se reconoce el derecho a la protección de la salud……. ¿Qué estoy leyendo? ¿Qué mente calenturienta o perversa ha podido pensar unas reglas tan absurdas, tan retorcidas, tan bellas y deseadas, justas y equitativas? Este libro es un desatino, me acongoja su lectura, me agobia y esperanza pensar en la posibilidad de que una sociedad pueda vivir bajo estas normas. ¿Qué estoy leyendo? ¿Dónde vivo? Miro fuera, tras mi ventana, veo la mañana pasar y de repente me invade un Déjá Vu, cierro el libro, miro la portada, LA CONSTITUCIÓN ESPAÑOLA, ¡ahora lo entiendo todo!

jueves, 20 de junio de 2013

Desde mi Ventana

Desde mi Ventana veo el mar, acurrucado tras los cristales me embriago del magnifico atardecer, de la puesta de sol que ilumina la bahía los minutos previos a que el faro comience a emitir sus protectores destellos. Mi ventana protege del salitre las flores que  desde el alféizar me envuelven en un agradable aroma, me protege de la brisa vespertina que amenaza con convertirse en tormenta anunciada por negras nubes. Me siento protegido, me siento bien pero, con el primer destello del faro vuelvo a la realidad y recuerdo que tras mi ventana la tormenta ya ha estallado, sin truenos, sin relámpagos ni vientos huracanados, sin olas rompiendo a escasos metros de los cristales; la tormenta es más real, más cruda y cruel, la tormenta se ha instalado afuera y amenaza con arrasar hasta los últimos vestigios del bienestar conocido y ahora anhelado sin que los dioses terrenales hagan nada por evitarlo. Mi ventana es solo un espejismo, un muro que me impide ver la realidad, que me excusa de luchar contra la sinrazón que se vive fuera. Desde mi ventana, voy a mirar  la vida y reprocharme todo lo que puedo hacer y quizá el miedo me impide hacer